Jaxon 'Strong', el bebé que
ha conmovido al mundo
Nació sin partes de su cerebro y de
su cráneo y fue diagnosticado con anencefalia.
Nació sin la mayor parte de su cerebro y cráneo. No esperaban que viviera. Sus padres hasta consideraron abortar cuando supieron de su condición. Pese a todo eso, Jaxon Buell cumplió su primer año de edad y se hizo famoso en Facebook por su apodo: 'Strong' (fuerte).
Brandon y Brittany Buell fueron informados durante el embarazo de que su bebe tenía una malformación cerebral extrema: significaba que no sobreviviría al embarazo. Pero Jaxon no lo creyó así. Contra toda probabilidad nació y ya tiene un año de vida: su historia es inspiración para las más de 100.000 personas que lo siguen en Facebook.
Jaxon fue diagnosticado con anencefalia, una malformación congénita del tubo neural en el que un niño nace sin partes del cerebro y el cráneo. Pero los médicos no estuvieron seguros de la gravedad del mal sino hasta después del nacimiento.
Brandon, de 30 años, declaró al matutino 'Daily Mail': "Después de nuestra segunda ecografía a las 17 semanas, cuando nos enteramos de que era un niño, sabíamos que algo estaba pasando cuando el técnico del ultrasonido se dirigió a la cabeza y se fue muy tranquilo".
El padre de Jaxon comentó que al día siguiente los médicos llamaron a su esposa por estar preocupados por los resultados de la ecografía. Luego de descartar cinco probabilidades entre los médicos durante varias semanas propusieron que interrumpieran el embarazo a las 23 semanas de gestación: ellos, cristianos, no contemplaron esa idea como una alternativa.
"Nos fuimos a casa esa noche pensando en que si abortáramos, nunca sabríamos lo que Jaxon podría haber sido o si hubiera sobrevivido", dijo Brandon. Ellos lucharon, querían una oportunidad para Jaxon, como cuentan en Facebook. Brittany, de 27 años, se sintió devastada. Su alegría de estar embarazada desapareció al saber el posible destino de su hijo. Pero nació con vida: sobrevivió desde que nació el 27 de agosto del 2014 mediante cesárea pesando cuatro libras (un kilo con 814 gramos).
Sus primeras tres semanas estuvo conectado a múltiples tubos en la UCI del Hospital Winnie Palmer, Florida. Durante ese tiempo, los neurocirujanos trataron de entender su condición: explicaron a los padres que probablemente el niño nunca camine, hable, escuche, vea y que ni siquiera podrán saber cuándo tiene hambre.
Tras dos meses en urgencias, nació la esperanza. Jaxon vivió al borde de la muerte hasta que fue trasladado al Hospital de Niños de Boston, especializado en neurología pediátrica: allí le dieron el diagnóstico certero, la medicina y la nueva condición de Jaxon para que sea feliz.
En Estados Unidos, uno de cada 4,859 bebes nace con este padecimiento. Según el Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC por sus siglas en inglés), por lo general, todos ellos mueren poco después de su nacimiento.
Publicado por: EL COMERCIO (PERÚ) / GDA |
29 de septiembre de 2015