EL MAPA O PLAN IDEAL DE LA VIDA

        En cada ser humano se hallan en estado latente todas las posibilidades y los poderes, expresándose progresivamente según cada uno de nosotros sabe reconocerlas en sí y hacerse vehículo para su manifestación. El reconocimiento del aspecto ideal e interior de una determinada cosa, y el apoyo consciente sobre el mismo es el medio para que aquella cosa se actualice y se haga evidente exteriormente.

        Ahora, hay un medio simple y práctico, eminentemente masónico, para alcanzar y realizar el objeto de nuestras aspiraciones, sean cuales fueran las mismas. Este medio, cuya sencillez es a la vez maravillosa como sus efectos, consiste únicamente en trazar el mapa o plan de lo que uno desee, y fijar la atención sobre el mismo. La Fe implícita en el trazado, y la sugestión de las palabras, imágenes y afirmaciones que se han puesto en el mapa, como de una manera casi automática, así es que el mapa se realiza en sus particulares y pormenores con asombrosa exactitud.

¿Qué hay que poner en el mapa?

Helo aquí: lo que uno quiere ser y alcanzar, interior como exteriormente; lo que uno quiera poseer moral y materialmente; lo que uno desea pensar y expresar en sí mismo. Particularmente las cualidades y facultades que quiere desarrollar, las posibilidades que quiere manifestar, los anhelos e ideales que desea se realicen en su vida, la perfecta solución de cualquier problema que le preocupe o dificultad en que se encuentre. Todo, es una palabra, lo que contribuya para hacer su vida más plena, perfecta, satisfactoria y feliz.

        ¿Cómo ha de ponerse?

Por medio de palabras e imágenes, representaciones y afirmaciones, que lo expresen de la manera más clara, sugestiva y evidente. Esto puede hacerse ya sea escribiendo directamente y dibujando las palabras, imágenes y símbolos de lo que se desea, en una hoja grande de papel o papel cartón, ya sea recortando las palabras y figuras que se necesiten y se crean más convenientes, de alguna revista o periódico, pegándolas oportunamente en la hoja mapa.

        Una vez hecho o levantado el mapa (que pude luego ser modificado, añadiendo nuevas ideas, imágenes y palabras), lo colocara sobre una pared en su cuarto particular, o donde estime más conveniente, de manera que pueda con frecuencia fijar su atención en el mismo. Esto es todo.

        Nuestros pensamientos y nuestro subconsciente, como verdaderos obreros constructores, aliándose y trabajando en armonía con las fuerzas misteriosas del mundo mental, harán lo restante, de esa manera se realizará perfectamente según lo hemos proyectado. Muchos son los que pueden testimoniar la manera milagrosa en que obra este medio tan sencillo: desocupados crónicos han encontrado su trabajo; enfermos se han completamente aliviado sin remedio exterior; otras han llegado a mejorar notablemente su posición, alcanzando el puesto y condición que representaban la cumbre de sus aspiraciones; otros que se encontraban en la más completa ruina material y moral han hallado en este medio las alas para levantarse y conquistar nuevamente su lugar en la vida; los que estaban ahogados en las deudas pudieron salir satisfactoriamente de todos sus compromisos; y finalmente los que hallaban angustias y sinsabores de carácter sentimental o familiar llagaron a recomponer su vida en forma más deseable.

        Pruébelo ahora mismo (sin dejarlo para mañana) y no dejará de corroborar la eficacia del plan, añadiendo su propio testimonio además.

UN IDEALISTA PRÁCTICO

GRANOS DE ORO

  • Un hombre nunca encuentra su oportunidad en el trabajo de otro: siempre en el suyo propio.
  • Puede haber un largo camino para llegar al fin deseado, pero nunca se halla lejos el paso inmediato en aquella dirección.
  • En hombre que tiene miedo al trabajo no se le acerca bastante para hacerlo como es debido.
  • El factor más importante en un trabajo no es su compensación, sino el servicio y la utilidad de la obra.
  • Ningún negocio es tan enteramente material que pueda ser descuidado en sus aspectos ético y espiritual.
  • La verdadera magia del negocio estriba en cambiar la chamba de una posición, trasmutando el trabajo en alegre servicio.
  • Un hombre se hace un hilo viviente cuando se llene con corrientes dinámicas de pensamiento.
  • Cuando un hombre no es el amigo de su trabajo, tampoco el trabajo será su amigo.
  • La ansiedad nunca resolvió un problema.
  • Quien es más fácilmente herido que ayudado tiene casi siempre un punto que le duele.
  • Quien soporte la corrección de su obra es más capaz de corregir a los demás.
  • Un hombre no puede permitirse quitar tiempo a su negocio para recrearse hasta que no llega a recrearse en su negocio.
  • El tiempo y el esfuerzo que da un empleado tienen poco valor hasta que no da también su interés.
  • Con el tiempo la lengua de plata no llegara a hacer bien como el corazón de o


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