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Editorial

¿A  DÓNDE VA EL hombre?

Tomado de: Revista Ariel No.63, Mayo de 1954
Artículo reeditado el 21 de Diciembre de 2002 en el libro “PAZ”,
Selección de Artículos del Pr. OM Lind Schernrezig

 

La especie humana ha aumentado en los últimos diez años 25'000.000 de individuos a pesar de los 50 millones que murieron en la última guerra.

En los 20 años próximos la especie aumentará 700'000.000 (setecientos millones) a menos que las bombas atómicas y los venenos biológicos y los rayos de la muerte lo impidan. Si la humanidad de hoy apenas puede alimentarse contando solamente 2.400'000.000 de individuos, ¿cómo llegará a alimentarse los 4 billones que poblaran este mundo dentro de 100 años?  ¿Es que a humanidad debe depender de la guerra para poder alimentarse y no morir de hambre? ¿O esperar un porvenir lleno de amenazas y de azotes no conocidos hasta hoy? ¿O encontrará un motivo inteligente para no engendrar más hombres cívicos, imbéciles, viciados, anormales y útiles sólo para hacer la guerra y crear dificultades a las minorías más competentes?  ¿Débese continuar formando hombres sin conciencia, innobles e irresponsables, por cosechas de millones, para dirigir las masas y arengarlas, en tanto que los más capacitados, los más honestos, los ciudadanos dignos deben pagar y sufrir los refregones de esta civilización materialista, caótica y monstruosa?

¿Cuándo tendremos la Carta del Hombre que protegerá a las minoras inteligentes y honorables contra las avalanchas monstruosas de masas sin conciencia, que se imponen siempre a la fuerza por el número?  ¿Cuándo se dará importancia a la Cualidad? ¿Cuándo constituiremos una Civilización por la Aristocracia de la Inteligencia, de la Nobleza Espiritual y del Poderío Moral exclusivamente?

Las guerras, lo sabemos muy bien, no resolverán ningún problema, entonces urge Organizar la Paz, pero también urge evitar la procreación del virus de la sociedad humana que, por sus vicios, su estupidez y sus pasiones brutales compliquen la existencia de nuestra especie y hagan de este mundo un verdadero infierno.  Urge organizar la capacidad procreatriz del hombre si se quiere resolver los problemas sociales y económicos del porvenir, puesto que, si al presente ellos son trágicos, dentro de 100 años la especie humana habrá perdido al menos el 20% de sus aptitudes y cualidades presentes y, el modus vivendi no será más que un "Sálvese quien pueda", de elementos sub-humanos sin conciencia, degenerados física y mentalmente, que conforman hoy por hoy la mayor parte de escuelas, hospitales, cuarteles y prisiones.

Es innegable que al presente el hombre no quiere ponerse de acuerdo con los problemas que suscitan el Obrerismo, el Capitalismo, el Estado, la Religión y el mismo Comercio puesto que ellos no resuelven sus dificultades y no pueden armonizar sus intereses. Por lo tanto ¿qué será del Mundo dentro de 10, 20, 50 o 100 años?¿Podría la humanidad subsistir un ciclo más? -Tenemos nuestras dudas puesto que, a la hora actual, la violencia se usa en todas partes y mientras más se piensa en los problemas más se complican. Los individuos no son capaces de resolver sus propios problemas hoy.  Las naciones mucho menos.  La S.D.N. ha caído ante sus propios problemas y la ONU vacila delante de los problemas enormes que ella esquiva pretendiendo siempre defender intereses de cada uno, olvidándose de pensar en un sentido de Paz Universal, en un sentido de resolver los problemas humanos para la libre expresión de la conciencia humana y de la libertad individual, es decir en un sentido humanístico o humanitario conciencial. Entonces la Humanidad tiene necesidad en el momento de una filosofía del Corazón.  Menos Política.  Menos Religión. Más buen Sentido y más Honestidad. Menos vicios, menos pasiones y orgullos.  Más Dignidad, más Sinceridad consigo mismo, Nobleza de Alma, de Bondad, de Generosidad, de Compasión, de CoHUMANISMO.

Todo esto para evitar el progreso de problemas en curso. Debemos planear el porvenir y poner soluciones radicales.  Todo esto no por medio de la violencia o de la confusión, sino por la utilización inteligente de nuestras capacidades creadoras de Conciencia, base fundamental de la Ciencia de la Vida propia, Digna, Armoniosa, Dichosa y Dignificante.

Profesor Omar Cherenzi Lind - Maestro K. H.