La Habana, Cuba, Capitolio Nacional

Sede Espiritual del CONGRESO MUNDIAL PERMANENTE DE TODAS LAS RELIGIONES, FES, FRATERNIDADES Y FILOSOFIAS, 1959.

MENSAJE de S.S. OM Lind-Schernrezig

Organizar y regir un Congreso Mundial de todas las Religiones, Fes, Fraternidades y Filosofías hacia un prestigioso éxito no es tarea fácil en cualquier época normal.  Llevar a cabo la misma tarea y misión en un país en completo alboroto y ensayando una reciente revolución humanitaria es otra cosa bien distinta.  Rodeados por toda suerte de sublevadas pasiones y esfuerzos rehabilitadores resulta duro encontrar nuestro rumbo y saber exactamente lo que es correcto o errado, o como debemos comportarnos.  De hecho, después de diez largos días de trabajo intensivo con tres sesiones diarias, nos preguntamos cómo continuamos vivos ya que el estrés y el desgarro por los constantes esfuerzos en medio de terribles peligros de traición, sabotaje y amenazas o insultos es algo sin parangón como prueba impuesta sobre la naturaleza y el carácter humano.

No obstante, tenemos fuerzas para seguir adelante.  Ahora no podemos abandonar ni el barco ni los ideales. Patrick Henry una vez dijo: "Dadme Libertad o Muerte". Aquí nosotros nos sentimos como si dijéramos "Mi Libertad por mi Vida", o en otras palabras, "La Vida seria imposible sin Libertad".  Esto no es patriotismo barato sino sensata y trascendente filosofía de vida, porque, qué significa realmente la vida sin Libertad. Tuvimos amplia oportunidad de descubrir que por ahí la Iglesia Católica Romana procuró por todos los medios concebibles romper nuestra fe, anular nuestras perspectivas, destrozar nuestra voluntad, sabotear nuestros esfuerzos, y hacer imposibles todos los frutos de nuestros sacrificios.  Se daba por supuesto que debíamos aceptar el catolicismo romano, nos gustase o no.  Fuimos incluso amenazados, lisonjeados, sobornados y perturbados en cierta medida, pero siempre acabábamos por asumir que sin completa libertad la vida seria absolutamente miserable, irresponsable, vacía y estúpida en grado sumo. Nunca consideramos abandonar toda esperanza pero sí vimos momentos oscuros.  No es un juego vivir entre fanáticos inspirados y guiados invisiblemente por sacerdotes bribones. Es verdad Cuba está con la cabeza profundamente metida en una revolución bien suya, pero la Iglesia romana también esta organizando una revolución bien suya, una auténtica tiranía invisible ya que se da cuenta que está perdiendo terreno.

A pesar de todas estas atormentadoras pruebas, no obstante no guardamos resentimiento contra estos mórbidos religionistas quienes confunden la iglesia con la religión, o bajo la impresión de que Dios puede inspirar mala voluntad, odio, infamias satánicas y sádicas medidas inquisitoriales.

La Iglesia Romana proclama que Cuba está sumergida en el comunismo (Nota de Ariel. El Congreso fue realizado a finales de 1959, antes de que Cuba se declarará Comunista ante el bloqueo Norteamericano).  En realidad nosotros no hemos visto ni los ojos ni las manos de tales gentes y todos los intentos, sabotajes, insultos y malos tratos que hemos recibido han venido siempre directamente de los católicos romanos, hasta el extremo de que nos estamos preguntando si nuestro Congreso Mundial no se celebra enteramente para defender el derecho de la LIBERTAD Religiosa y para el derecho de la conciencia humana de expresarse libremente.  En realidad los católicos romanos se oponen a cualquier clase de competición y comparación.  Aborrecen la idea misma que gentes ignorantes puedan oír hablar de la existencia de otras religiones.  Se oponen a que se abran los ojos de la mente y de la conciencia de la Ciudadanía del mundo en lo que respecta a la dignidad humana y los genuinos valores espirituales.  Quieren mantener al pueblo ignorante de las maravillas de la vida y de los auténticos poderes de Amor y Sabiduría Divina, colocando en su lugar una especie de idolatría que vanagloria la superstición y la falsa misericordia.  Nuestro Congreso Mundial se opone a todos estos desechos de superstición e idolatría que se cultiva en lugar del incondicional Amor Divino, Buena Voluntad universal e imparcial o inegoista, profunda tolerancia y clemencia e infinita compasión y gentileza sobre la triple piedra angular de UNION MORAL Y ESPIRITUAL, RECTA COOPERACION Y DESINTERESADA HERMANDAD, comprendiendo que solamente en tales condiciones pueden ser curados los males y erradicadas las viciosas maldades.

No hay ni Oriente ni Occidente, ni hermandad negra o roja, verdad larga o corta, Luz Divina romana o china. La Verdad Espiritual real es universal y eterna y llegamos a comprenderlo verdaderamente cuando trascendemos todas las limitaciones y nos desprendemos de las ataduras de la vida materialista.

Nuestras terribles experiencias prueban no obstante que en el Occidente hay mucho para hacer.  En vez de enviar Misiones al Este, el Occidente ganaría mucho más guardándose sus misioneros para sí mismos. Aún más, el Este podría ganar haciendo lo mismo. Todos ganaríamos más, sin embargo, aprendiendo a ser más compasivos y gentiles, amistosos y fraternales, tornándonos así en resplandecientes faros de Amor Divino y Verdad Espiritual.

La necesidad de COMPRENSION, COOPERACION Y HERMANDAD se está haciendo cada día más aguda y a menos que la gente se de cuenta de los peligros que la rodean, en un mundo de crecientes problemas e incisivos materialismos, toda la humanidad será pronto una víctima desahuciada.  La actitud aquí de la Iglesia Católica Romana y de otras durante el Congreso Mundial demuestra ampliamente que ninguna Religión, ningún grupo de gente, ninguna minoría ni nación alguna está a salvo de una cierta tiranía invisible regida por hipócritas malvados.  De hecho, si hoy el mundo entero está sujeto a tanta turbulencia y desasosiego social es precisamente porque la humanidad entera esta despertando y busca gozar de verdadera democracia, justicia social, integridad y libertad religiosa y dignidad espiritual, que faltaron tanto en todas las latitudes debido a las erradas, malvadas, depredadoras y odiosas formas de políticas y religión.  Cuando vemos una Iglesia enseñando una maravillosa moralidad y filosofía, y que sin embargo se comportan de manera contradictoria, no podemos más que comprender el por qué el mundo está tan repleto de problemas, vicios, criminalidad y guerras, y propender a simpatizar con las desdichadas víctimas de todas las prestigiosas falsedades, que hacen la ley pero que nunca la respetan, y que claman Divina autoridad pero que se comportan como si fuesen exaltados siervos del infierno.

Es inútil decirlo, la humanidad está lejos de ser perfecta. Tampoco seria inteligente creer que la evolución humana puede ser acelerada y lograda en un corto termino de pocos meses o años.  Más aún, persiste el hecho de que después de muchos miles de años la especie humana permanece ignorantemente desenfrenada, víctima de la villana superstición, adicta a ominosas y suicidas vicios e interesada en la real Hermandad y la Religión, o los Valores espirituales de forma fantasiosa, simbólica y sensorial.  La Síntesis Espiritual es aún un sueño exagerado y la real Comunión Espiritual entre las gentes de diferentes credos, fes y razas un ideal brillante de irrealizadas proporciones. El éxito en estos maravillosos campos todavía es demasiado esquemático y convencional o superficial.

El día que veamos Vedantistas, Jainistas, Budistas, Brahamnistas, Taoistas, Cristianos, Judíos, Hermetistas, Parsis, Masones, Espiritualistas, Rosacruces, Esenios y Bahais reunirse de manera amistosa y sagaz o cuando las gentes de todas las Iglesias y naciones acepten realmente trabajar juntas por el Bien Común y la verdadera Paz, Bienestar Social y Hermandad-Comunidad como durante este Congreso Mundial que estamos celebrando en Cuba, realmente este día seremos capaces de creer en la decisión del hombre de vivir como una gran Familia inteligente y recta o un Orden Espiritual.  Naturalmente este gran ideal está siendo lentamente transformado en positiva realidad, pero el progreso realizado es tan pequeño e insignificante en comparación con el tremendo egotismo, sectarismo y egocentrismo de los sistemas de ortodoxia y ciudadelas armadas que no podemos mas que llorar ante el fracaso.  Eso se entiende mejor, naturalmente, cuando vemos sociedades que se llaman ellas mismas "BUENA VOLUNTAD”, "IGLESIA DIVINA”, "CONFRATERNIDAD MUNDIAL", "DHARMA-SANGHA", "AMOR UNIVERSAL Y SABIDURIA", etc, siguiendo sus propios rumbos sectarios, olvidadizos de la genuina realización de los principios que tanto alaban y/o irrespetuosas entre ellas.  El mundo es cruel, sí, pero porque los seres humanos así lo hacen y porque está enlodado, dividido, distorsionado y empapado en sangre por malhechores dañinos, belicistas y tantos prestigiosos fanáticos religiosos de todas clases.

La responsabilidad de todas las organizaciones religiosas, humanistas, fraternales, espiritualistas, doctas, místicas y filosóficas y la de sus flamantes líderes es naturalmente resolver los problemas mundiales y crear paz y hermandad en vez de tanto parloteo acerca de la Verdad Divina y de los principios espirituales.  No será la cantidad de oraciones o meditaciones la que hará que las gentes sean algo mejor si estas no empiezan por limpiar sus mentes, despertar sus conciencias y purificar sus corazones, y si se comportan como bribones, demonios o maleantes deberían comprender que seria tonto esperar que el mundo fuese mejor. En vez de predicar deberíamos empezar por mejoramos nosotros mismos.  En vez de salir afuera en trabajo de Misión, deberíamos empezar por perfeccionar nuestro propio ser.  En vez de buscar como mejorar las condiciones del mundo y de las naciones deberíamos, sobre todo, transformar al individuo humano en casa. Si cada uno hiciera lo mismo no tendríamos necesidad de tantas catedrales y templos o misiones y cárceles, hospitales o policías.